La malla antipájaros es un medio de lucha contra los pájaros ecológico y silencioso.
Su gran variedad de formatos, tanto en anchura como en longitud las hace especialmente útiles para explotaciones frutales y hortícolas de todos los tamaños, tanto a nivel profesional como particular.
Proteger cultivos con una malla antipájaro
Un medio de lucha contra los pájaros ecológico y silencioso
Existen múltiples factores que pueden dañar nuestros cultivos, arruinar todo nuestro trabajo y provocar perdidas económicas. Algunos de estos fenómenos son naturales, vinculados a la climatología, como lluvias intensas o calor extremo y por lo tanto no podemos controlarlos, pero hay otros elementos que si podemos manejar, como el daño que provocan las aves en los cultivos.
Se trata de una problemática de difícil control, y nuestra mejor arma en este caso es la prevención, para evitar:
- Daños en las plantas
- Disminución de la cosecha
- Putrefacción de los productos
- Aumento de los insectos
Las mallas antipájaros es un método de control eficaz sobre las aves que previene los daños que estas pueden producir en nuestros cultivos. Sus ventajas fundamentales son:
- Económicas su coste es reducido y duran varios años ya que tienen un tratamiento que las protege de los rayos ultravioletas
- Ecológicas, evitan el acceso de los animales sin aprisionarlos
- Inocuas para el medio ambiente y para nuestra plantación ya que permiten pasar el aire, el agua y la luz.
- Diversidad de formatos que se adaptan a cualquier necesidad pudiéndose instalar de una sola pieza, tanto en explotaciones profesionales como particulares.
- Ligeras por lo que su instalación es sencilla lo que reduce el coste en mano de obra.
- Al ser mallas tejidas, anudadas, no se deshilachan y son más elásticas.
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Mallas antipájaros tejidas – Más resistentes
Nuestras mallas están tejidas a base de polietileno al que se le añaden una serie de componentes que evitan que la malla se degrade con el sol por lo que pueden ser mantenidas de manera permanente o bien retiradas y almacenadas cuando su uso no sea necesario.
Su gran variedad de formatos, tanto en anchura como en longitud las hace especialmente útiles para explotaciones frutales y hortícolas de todos los tamaños, tanto a nivel profesional como particular.
Su uso en viñedo permite el control de las aves de manera ecológica y silenciosa, ya que no se requiere del uso de cañones sonoros a los cuales las aves se acostumbran rápidamente.
En nuestros pequeños huertos particulares, colocada sobre una estructura en altura, nos permite mantener controlado todo el terreno sin interferir en nuestro trabajo pudiendo disfrutar del trabajo sin las molestias de otros sistemas y con la ventaja de que no altera las condiciones climáticas naturales.